Es una historia acerca de una de mis grandes pasiones.
Hace poco leí una historia acerca de un turista inglesa, que se arrojó al mar, en la isla de Madeira, supuestamente para volver a entrer en un crucero donde su marido iba, la mujer fue rescatada del mar por tres jóvenes que habían decidido ir a pescar en esa noche y uno de los detalles que me llamó la atención en toda esta historia enrevesada fue que la dama en cuestión fue capaz de flotar, en las aguas frías del Atlántico, gracias a su bolsa. Y este último hecho no me sorprendió, ya que bajo ninguna circunstancia una mujer nunca deja su bolsa detrás. Lo que me lleva al tema que quiero explorar, las mujeres y sus bolsas. En este mundo hay dos tipos de admiradoras de bolsas, las que utilizan las grandes bolsas, tipo XL y las mujeres que prefieren la talla S.
Yo pertenezco al primer grupo, porque toda mi vida se concentra en mi bolsa. Yo soy el tipo de mujer que en caso de emergencia se puede encontrar casi cualquier cosa en el fondo de mi bolsa, como si fuera el sombrero de un mago, todo tipo de cosas, desde emplastos, ungüentos, papel de escribir, agua, pastillas para un dolor de cabeza, etc, etc, piensen en lo quieran y probablemente, ese objeto consiste del contenido de mi bolsa. Más, tengo una amiga que poseía entre sus pertenencias personales un destornillador que había sido olvidado en el interior de su cartera y que la acompañó durante casi un año. Y no es broma! Por no hablar de las bolsas de las mamas que son verdaderas almacén de cosas que le dejaria la boca abierta de asombro. Pero por qué las mujeres sienten la necesidad de tener todo en sus bolsas? No lo sé. No tengo ninguna explicación lógica para este comportamiento casi loco, lo que implica kilogramos de pertenencias transportados diariamente con consecuencias a largo plazo para nuestra estructura ósea, en mi caso, sólo puedo decir que no me gusta ser cogido con la guardia baja, tengo que tener todo al alcance de la mano. Mi vida diaria es una carrera entre el punto A a B, C y D, y esto significa que puedo acceder rápidamente en el contenido de mi cartera para todo tipo de cosas que necesito para mi ajetreo diario. Honestamente, admiro a las mujeres que lo concentran todo en un objeto pequeño, pero no sé cómo se las arreglan. Cuando tengo que ir a una fiesta y llevó una clutch, siento ansiedad con sólo mirar a ese espacio tan estrecho que no permite que lleve casi nada. Y pienso, que hago con esto? Básicamente, mi bolsa es una especie de salvavidas para todas las ocasiones y ahora volvemos de nuevo a la turista que se arrojó en el mar, si no fuera por su bolsa habría sobrevivido? Lo dudo!